La Planta de energía nuclear en California
La Planta de energía nuclear en California
EL plan para reemplazar la Planta de energía nuclear de California del envejecido reactor de Diablo Canyon
por uno de energía limpia puede ser un modelo para la lucha contra el cambio climático en todo el país.
Durante años, algunos han afirmado que no podemos luchar contra el cambio climático sin la energía nuclear,
ya que el cierre de las plantas nucleares significarían quemar más combustibles fósiles para generar electricidad de reemplazo.
Eso está mal, por supuesto, y ahora tenemos la prueba.
Hoy en día, Pacific Gas and Electric de California se convirtió en la primera compañía de electricidad
para anunciar planes para reemplazar un reactor nuclear viejo con inversiones sólidas y hará más y ayudará a conseguir más potencia limpia del viento y el sol.
El anuncio fue parte de una propuesta conjunta negociado con la ayuda de NRDC, Amigos de la Tierra, y otros grupos laborales y ambientales.
Reactores nucleares de Diablo Canyon
Cuando PG&E se retire de sus dos reactores nucleares de Diablo Canyon, que está planeado entre 2024 y 2025,
la electricidad que generarán será reemplazada con energía eficiente, energía renovable y tecnologías de energía libre de contaminación.
La planta de energía nuclear de California será clausurada y harán que el estado sea más flexible,
por lo que más energía renovable puede alimentar negocios y hogares de California.
Y todo esto va a costar menos que mantener abierta Diablo Canyon por otros 20 años.
La Comisión Reguladora Nuclear en última instancia, cree que el ahorro de los clientes será de más de $ 1 mil millones.
La gente de PG&E dice que la energía limpia ayudará a la economía y que con este plan de futuro dará lugar a facturas de servicios públicos de más bajo costo para sus clientes.
Es un trabajo que se puede lograr cuando todos nos movilicemos en torno a un objetivo común.
Lo que es más importante es que, este plan es un modelo que puede ser replicado en todo el país,
donde cerca de 100 reactores nucleares se retirarían en las próximas décadas, y en todo el mundo.
En este momento, los reactores nucleares de Estados Unidos proporcionan alrededor del 20 por ciento de nuestra electricidad en todo el país.
El Departamento de Energía de S. U.
Nos dice que para el 2050 podemos obtener casi dos terceras partes de nuestra electricidad a partir del viento y el sol,
mientras que las ganancias de eficiencia aseguran que hagamos más con menos desperdicio de energía.
El año pasado, el 62 por ciento de toda la nueva capacidad de generación eléctrica instalada en este país fue impulsado por energía solar o eólica
Y el crecimiento en el consumo de electricidad se ha reducido drásticamente desde el 2000,
en gran parte gracias a las mejoras de eficiencia energética.
La propuesta conjunta está sujeto a la aprobación de los reguladores estatales y federales y muestran cómo podemos mantener el impulso,
y eso es lo que va a tomar para proteger a las generaciones futuras de los crecientes peligros del cambio climático.
El año pasado fue el más caluroso en California desde el último registro que fue en 1880.
Este año se espera un incremento en la temperatura y de ser aún más caliente que otros años
y de los años más calientes que se puedan registrar en los últimos 20 años.
Tenemos que reducir la contaminación de carbono hoy para que nuestros hijos no hereden más caos climáticos mañana.
Por eso, el pasado diciembre en París, los Estados Unidos llevó a China, India, y otros más de 180 naciones
para poner los planes reales sobre la mesa y con el fin de dejar los combustibles fósiles
sucios que impulsan el cambio climático y usar maneras inteligentes y más limpias para alimentar nuestro futuro.
Pacific Gas and Electric de California
Con las ganancias de eficiencia y energía renovable pone a PG&E a la vanguardia de la transición global.
Esto demuestra que podemos reducir nuestra huella de carbono con la eficiencia energética y la energía renovable,
como nuestro parque nuclear de envejecido y cerca a la jubilación.
Y asi se da un gran golpe contra el desafío medioambiental central de nuestro tiempo, y del cambio climático que amenaza nuestro futuro mismo